La justicia Argentina contra el algoritmo de Google

La mejor pregunta para comenzar el post es: ¿quién no se ha Googleado alguna vez? Personalmente nunca conocí a nadie que no se haya fijado aunque sea una vez qué aparecía en Google (algunos intrépidos incluso se fijan en Yahoo o Bing) al buscar su nombre.

Si mantienen una vida online normal los resultados de la primer página seguro contendran sus perfiles en redes sociales y su blog (si tienen, y mientras hayan cuidado un poco el SEO), así como cualquier sitio que pueda relacionarse directamente con su nombre y Google lo haya guardado.

Ahora, ¿qué pasa cuando encuentran un resultado que ustedes creen que los perjudica? Ya sea que, por ejemplo, se mostraron sites que tienen almacenado su nombre y apellido en relación a su dirección particular o CUIT. Lo primero que se nos pasa por la cabeza es «quiero esto fuera de Google, YA», pero, ¿cómo?

Google

Una simple visita al centro de ayuda nos guía por una variedad de situaciones en las que nos podemos ver envueltos y que querríamos resolver. Desde situaciones de malware y spam, hasta copyright y datos personales. Pero no todo es tan simple como parece, ya que no es Google quien directamente borra porque si un resultado, como ellos recomiendan, lo mejor es contactarse con el webmaster del sitio que muestra la información o con el servicio de hosting del mismo. Por lo tanto, cuando se trata de borrar resultados, las políticas de Google no son para nada laxas.

Sólo tomo un simple fragmento de su soporte técnico para luego explicar los casos a continuación:

Si has visto algún contenido en la Web que te gustaría que se eliminara, debes ponerte en contacto con la persona responsable de ese material. La mayoría de las veces, esto significa que debes ponerte en contacto con el webmaster de la página y pedirle que retire el contenido en cuestión. Aunque hayas encontrado el contenido inadecuado a través de Google, Google no puede controlar el contenido de los sitios incluidos en los resultados de búsqueda.

Queda claro, verdad? Remover un resultado de una búsqueda no es ni remotamente cercano a resolver la cuestión de fondo.

Primero analicemos qué pasa en el extranjero, concretamente el hogar de Google, Estados Unidos. Según una ley de 1996 (47 U.S.C. 230) los buscadores no son responsables por el indexado o linkeado a sitios de terceros con contenido difamatorio. Así tenemos juicios en que los buscadores salieron victoriosos, como Murawski v. PatakiParker v. Google, Mmubango v. Google, o los casos de Nieman y Getachew.

Volviendo al mundo del revés, me llamó la atención esta semana dos noticias. Por un lado, la actriz Paola Krum que llevaba dos años de juicio contra Google, ganó frente a la Corte Suprema una indemnización de $300.000 pesos por perjuicios causados debido a que el buscador «ha usado comercialmente y sin autorización su imagen a través de los servicios de ‘búsqueda de imágenes’ y avasallado sus derechos personalísimos tales como el honor, nombre, imagen, dignidad e intimidad, por haberla relacionado con páginas de Internet vinculadas con actividades pornográficas, venta de sexo y similares«.

Por otra parte, hubo otros dos fallos que condenaron a Google y a YahooCarrozo, Evangelina c/ Yahoo de Argentina SRL y otro s/ daños y perjuicios y Solaro Maxwell, María Soledad c/ Yahoo de Argentina SRL y otro s/ daños y perjuicios.

El denominador común queda claro que es el contenido pornográfico o sexual con el cual las actrices fueron relacionadas en las búsquedas. Ahora, yo me pregunto, ¿quién subió las fotos?

google privacyEl caso más hipócrita es el de Evangelina Carrozo (‘bailarina de carnaval, modelo y ecologista’), a quien le parece súmamente correcto pedirle indemnización por perjucios ($135.000) a un buscador por fotos de prensa en la que aparece con poca o nada de ropa.

Según analizó el tribunal en el caso de Soledad Solaro Maxwell (quien ganó $280.000 en concepto indemnizatorio), ellos se preguntan “¿No es responsable acaso la empresa periodística o de medios por la difusión de contenidos ofensivos o dañosamente erróneos? Lo son, porque su producto comercial es la difusión y facilitación del acceso a información, datos o cualquier otro elemento que puede afectar derechos personalísimos o económicos de terceros”.

Tratando de entender el error de concepto que manejan los magistrados, me encantaría saber ¿cómo es que puden comparar un medio periodístico -destinado a informar- con un buscador online encargado de indexar y mostrar resultados de terceros generadores de contenido? Y más aún cuando todo el indexado se realiza automáticamente por un algoritmo.

Y no, no estoy defendiendo al pobrecito Google, busco hacer un llamado al razonamiento, al sentido común, que parece haberse perdido en los magistrados de nuestro país. El problema no es que Google o Yahoo tengan que pagar, el problema es que haya gente decidida a sacar provecho de una situación en la cual la responsabilidad esta erróneamente atribuída.

Como bien dice mi amigo Sergio, «es lo mismo que culpar a un bibliotecario porque un libro de la biblioteca dice X cosa«.

Mientras tanto, las peticiones para eliminar contenido de Google suben un 68%, al parecer, cualquier gobierno a quien no le guste algo suyo que aparece en internet, le pone un parche a la situación borrando un simple link de un buscador. Les recomiendo un artículo de Forbes sobre el tema específico en Estados Unidos.


Comentarios

8 respuestas a «La justicia Argentina contra el algoritmo de Google»

  1. Avatar de Leandro Ucciferri
    Leandro Ucciferri

    Lo que hace que parezca todo una gran montaña rusa.

  2. Avatar de Leandro Ucciferri
    Leandro Ucciferri

    Hola Fabio!
    Coincido en lo que planteas, sobre todo en que Google debería ser el primero en ofrecer herramientas fáciles de utilizar para cualquiera que tenga una queja en relación a algo que lo afecte directamente, el ‘soporte’ de ellos en ese aspecto deja mucho que desear y se lavan las manos ni bien tienen oportunidad.

    Gracias por pasar a dejarme tu opinión 🙂

  3. Avatar de Nico Andrade
    Nico Andrade

    ”es lo mismo que culpar a un bibliotecario porque un libro de la biblioteca dice X cosa“; decile a Sergio que está equivocado. Un bibliotecario no gana su sueldo según cuántos libros se consulten, y la biblioteca en todo caso es pública. Otra cosa es ganar un rédito brindando un servicio, tal cual hace Google. Sobre el caso de Paola Krum que parece ser el más claro, Google «asoció» la imágen de la actriz con pornografía; y eso para una actriz y madre de familia es sin dudas un perjuicio.

    Lo que pasa es que en un blog de informática tenemos tendencia a ver las cosas desde un punto de vista informático, lógico; y no tanto desde un punto de vista jurídico.

    1. Avatar de Leandro Ucciferri
      Leandro Ucciferri

      Hola estimado!
      Antes que nada rectifico un par de puntos. Siguiendo con la analogía utilizada; claro que el bibliotecario no gana por cuántos libros se consulten, así como tampoco Google gana dinero por TODOS los links que aparecen en sus resultados. Ahora, el bibliotecario tiene responsabilidad alguna por lo que diga un libro? No. El simplemente administra. Por cierto, hay miles de bibliotecas privadas, eso también es una falacia.

      Se equivoca en un punto, sí lo analizo desde un punto de vista jurídico, pero no me dejo enceguecer dejando de lado el aspecto téncnico, que merece ser tenido en cuenta sobre todo para aplicar con precisión el derecho. Claramente el caso de Paola Krum es el menos problemático de entender, y comprendo su situación personal, pero no puedo ignorar los errores de concepto.

      Google no ‘asoció’ los resultados porque es un ente malito malito y quiere perjudicar una actriz ‘conocida’. Por el contrario, imagino que sabrá que el algoritmo utilizado es extremadamente complejo, y que funciona en base a palabras clave utilizadas por los sitios que son examinados por los webcrawlers para finalmente indexar. Así que, no, no hay una persona detrás de un monitor curando el contenido que se muestra y menos aún, los resultados no son creados por Google, ni el resumen (snippet) que aparece en cada link, ni las imágenes les pertenece. En el caso Krum, gracias a que escribieron sobre ella por una escena ‘hot’ en una novela, se relacionaron links por palabras claves como ‘sexo’. Yo digo, quien debe indemnizar no es quien sube o publica el contenido? La fuente original del originador del perjuicio?

      Me parece que atacar al buscador es ir contra el intermediario. El mensajero, no quien envió el mensaje, es el que está pagando acá. Y eso ya me parece una aberración como tal.

      1. Avatar de Nico Andrade
        Nico Andrade

        Hola; el bibliotecario no tiene responsabilidad de lo que dicen los libros, pero si para hacer más fácil su trabajo escribe un software que hace asociacionesm incorrectas, tampoco sería culpable ya que su software es para él. Pero qué pasa su hace público el programa, y otra gente empieza a usarlo? Y qué pasa si este bibliotecario pasa a ser el bibliotecario más usado del mundo?

        Google pasa a ser en este caso casi otro creador de contenidos, usando partes de otros contenidos crea nuevos contenidos que pasan a ser los resultados de búsqueda. Por ejemplo si yo agarrase y crease un «buscador» que busca en Google y devuelve resultados, -y si ese buscador fuese popular y casi voltearía a Google-, ¿Google no va a pretender llevarse una tajada por copiarle su «contenido»?

        Te aclaro que no tengo nada contra el artículo, solamente quiero decir que la justicia no va «contra el algoritmo de Google» y mucho menos es como dicen los comentarios de arriba (se va contra el que tiene plata y demás comentarios)

  4. Avatar de Ezequiel Martínez Rickert
    Ezequiel Martínez Rickert

    Esta mas que claro que no solo el sentido comun es lo que se perdio en este pais. Pero en este tema en particular es algo que jamas entendi, desde la primera vez que escuche en los medios, ya no me acuerdo quien fue. «X le hace juicio a Google por las fotos hot» y yo WTF! Es simple logica. Es como dice tu amigo Sergio. Y como dice Sebastian Bassi. Aca en este pais no importa quien tiene razon o no sino quien es capaz de pagar mas.

    1. Avatar de Leandro Ucciferri
      Leandro Ucciferri

      Tal vez sea algo naive de mi parte pensar de esa manera, por lo menos como estudiante de Derecho y amante de internet y tech me encataría ver que se utilice la lógica y el razonamiento para la solución de este tipo de conflictos.

  5. Avatar de SebastianBassi
    SebastianBassi

    La justicia argentina va contra quien puede pagar, no importa la lógica, o mejor dicho, esa es la lógica.

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