Más de 40 millones de turistas visitan París anualmente. La atracción no es en vano. La también llamada Ville de la Lumière o la ciudad de la luz tiene una gran variedad de sitios emblemáticos. Hay muchas cosas que hacer y visitar en una visita a la capital francesa. Te mostramos los 5 monumentos más emblemáticos.

Hacer un viaje para conocerlos es muy interesante considerando que París es una de las ciudades más monumentales del mundo. Entre tantos monumentos, a los turistas les cuesta saber cuáles son los importantes.

Debes imaginarte que ante esta afición por conocer los múltiples atractivos de París siempre están llenos de gente. Por eso, antes de realizar, tu viaje, es recomendable informarse bien, planificar es tus visitas y buscar trucos para ahorrar gastos o ir cuando haya menos afluencia de personas, como por eso es importante ser precavido y comprar las formas de ir, como las entradas al palacio de Versalles, con anticipación.

¿Cuáles son los monumentos más emblemáticos de París?

1. La Torre Eiffel

La Torre Eiffel se considera el monumento más importante para visitar en Francia. Es todo un ícono de la ciudad e incluso, de toda Francia.

Se trata de una estructura de hierro. Fue construido por el ingeniero civil Gustave Eiffel en el año 1889 para la Exposición Universal de París con el objetivo de celebrar el primer centenario de la Revolución Francesa.

En un principio, la torre se pensaba desarmar al año siguiente de su inauguración, pero los parisinos comenzaron a empatizar con ella hasta convertirse en el edificio más emblemático y visitado de París y del mundo, con más de 7 millones de turistas anuales.

La Torre Eiffel tiene 300 metros de alto y puede verse desde cualquier punto de París. Es posible subirla caminando o en ascensor. 

2. La Catedral de Notre Dame

Fue construida entre 1163 y 1345 y se trata de una de las iglesias más antiguas del mundo. Allí se celebró la coronación de Napoleón y la beatificación de Juana de Arco, por solo citar algunos ejemplos de lo que ha presenciado este monumento ubicado en el centro histórico de París.

Esta espectacular catedral gótica está dedicada a la Virgen María, de hecho, Notre-Dame, que significa “Nuestra Señora”.

Como es sabido por muchos, en 2019, Notre Dame fue devastada por grave incendio y que arrasó con el techo y destrozó la aguja central de la capital

Las donaciones para la reconstrucción de la iglesia más querida por los parisinos alcanzaron cifras récord y se tiene prevista su reapertura para 2024.

3. El Arco del Triunfo

El Arco del Triunfo “Arc de Triomphe”, ubicado en la Plaza Charles de Gaulle, tiene 50 metros de altura. Se construyó por mandato de Napoleón Bonaparte. Representa las victorias del ejército francés, así que tiene un sentido de orgullo nacional.

Se encuentra específicamente en uno de los extremos de los Campos Elíseos, donde también se ubica la Tumba al Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial con una antorcha encendida permanentemente, en memoria de los caídos en batalla.

En el interior se puede visitar una exposición sobre su historia y subir a su terraza panorámica para apreciar toda París. En realidad, es uno de los mejores miradores de París.

4. El Museo de Louvre

París también es conocida como la ciudad de la cultura y del arte y el Museo del Louvre es el más visitado e importante de Francia. Este monumento alberga más de 3.000 mil obras de arte, entre las que figuran la famosa Gioconda (o Mona Lisa) de Leonardo da Vinci, La Consagración de Napoleón de Jacques-Louis David, el Código de Hammurabi, Las Bodas de Caná, Victoria de Samotracia y la Venus de Milo.

Este museo cuenta con 160 mil metros cuadrados. Está ubicado el Palacio del Louvre, una fortaleza del siglo XII, que sirvió por varias décadas como residencia de la monarquía.

Luego del traslado de la habitación real al Palacio de Versalles, el popular edificio comenzó un proceso de transformación que terminó convirtiéndolo en uno de los museos más importantes del mundo.

5. El Palacio de Versalles

El Palacio de Versalles es uno de los más famosos y opulentos del mundo. Fue construido en el siglo XVII y se convirtió en la sede del poder monárquico francés. Allí residieron personajes tan populares como María Antonieta y acontecieron eventos históricos como la firma del Tratado de Versalles.

El también conocido como Castillo de Versalles tiene una superficie total de 67 mil metros cuadrados en sus tres palacios (Pequeño Trianón, Gran Trianón y  Versalles), así como más de 700 habitaciones.

Esta gran obra arquitectónica declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es uno de los legados más importantes que dejó el rey Luis XIV, por lo que se considera una de las referencias más importantes de la grandiosidad de la era monárquica.